Sígsig 02 de febrero de 2022.- Como parte de las actividades del Plan de Manejo Ambiental implementado en el sistema de riego Cerro Negro – Churuco, técnicos de Riego y Gestión Ambiental del Gobierno Provincial del Azuay, (GPA) realizaron un monitoreo de anfibios y reptiles cuyo hábitat se encuentra dentro del área de influencia de este proyecto.
Esta labor se realiza dos veces por año para determinar que las especies no se vean amenazadas por las actividades que se realizan en el sector. En el recorrido, se constató la presencia de los anfibios: atelopus Jambato, en peligro de extinción, y dos especies de Pristimantis, así como especies de reptiles propios de las zonas andinas.


Diego Alvarado, coordinador de la Dirección de Gestión Ambiental del GPA, indica que los anfibios son considerados bioindicadores de la buena calidad del ambiente y mantienen el equilibrio de los ecosistemas: “Las ranas están relacionadas con cuerpos de agua, si se registra un buen número de anfibios, existe una buena calidad de agua. A esto se suma la importancia genética de la especie al ser animales en peligro crítico de extinción”.
De manera complementaria, explica el técnico, se trabaja en campañas de educación con la comunidad y los usuarios del Sistema de Riego, para informarles sobre la importancia de la protección de estas especies.


Así, el Gobierno Provincial del Azuay interviene, de manera integral, en el sistema de riego Cerro Negro – Churuco que tiene una línea de conducción de 38 kilómetros con un área regable de 500 hectáreas.
La junta de riego está conformada por 1000 usuarios y beneficia a más de 5000 personas de las parroquias de Cutchil, Ludo, San Sebastián y San Bartolomé del cantón Sígsig; y San Juan del Cid del cantón Gualaceo.